Justamente ahora irrumpes en mi vida, con tu cuerpo exacto y ojos de asesino, tarde, como siempre. Te vi, me viste.Nos reconocimos enseguida, pero tarde. Maldita sea la hora que encontré lo que soñé... tarde. Tengo ganas de huir, de no verte ni la sombra. De pensar que ésto fue un sueño, o una pesadilla. Que nunca apareciste, que nunca has existido. Tengo ganas de besarte, de coincidir contigo. De acercarme un poco y amarrarte en un abrazo, de mirarte a los ojos y decirte "Bienvenido". Qué ganas de rozarte, qué ganas de tocarte... y acercarme a ti y golpearte con un beso. Qué ganas de fugarnos para siempre, sin daños a terceros. Quererte a vos no es lo mejor, lo tengo claro. Habiendo tantas cosas por hacer, menos traumáticas; como hallarle figuras a las nubes, o como ir al cine, o no hacer nada. Quererte a vos no es lo mejor, pero me gusta. Quizás estoy jugando, como siempre, a la masoquista. En vez de distraerme con ropa, o con Internet como hacen todos. Quererte a vos me hace sufrir, qué buena suerte. Para acordarme de que existo y de que siento. Para tener en qué pensar todas las noches... para vivir. Quererte a vos es la
verdad más mentirosa. Es lo mejor de lo peor que me ha pasado. Es la ruleta rusa por un beso, es lo de siempre improvisado. Quererte a vos es la embajada de un instante en mi cerebro. Es, también, haberte odiado un par de veces. Quererte a vos es absurdo y lo sabemos, y así será... mientras nos dure. Tengo la firme convicción de que si estás me consolido. Tengo la sospecha de que ni sospechas cuánto te amo. Tengo tu foto puesta en la retina y tu voz baila en el estribo, el yunque y el martillo. Tengo la dosis de perdón, por si haces algo que me duela. Quiero estar segura. Un poco por ti, un poco por mí... un poco por celos. Te estoy hablando a vos, aunque te importe poco lo que estoy diciendo. Te estoy hablando a vos, aunque es perder el tiempo. Te estoy hablando a vos, tan sordo y resignado. A vos, que dormís con tu orgullo y te dejas tocar con tu rencor barato. A vos, que te gusta ir de mártir, repartiendo culpas que son solo tuyas. Te estoy hablando a vos, porque no hay nadie más que entienda lo que diga. Quererte es
mi pecado. Por no entender que nunca fuiste mío. Por las ganas de llenar este vacío que se formo entre el sentimiento y la razón ¿Cómo negar que pienso en vos y que sigues presente, aunque estés ausente? Aunque estoy pretendiendo olvidarte, para más recordarte. Donde estés, creo que es justo que te enteres que estoy bien, que sobrevivo. Y sobre todo que te enteres que, a pesar de tus errores y los míos, aún te quiero. No sé si por idiota o por romántica, no sé si por novata o por nostálgica. No sé si por ilusa o fatalista. No sé si por cobarde o masoquista, pero te quiero y no sé hacer otra cosa más que éso. Acá todo sigue igual que antes... Yo estoy sola como nunca, por eso escribo ésto y no pretendo que hagas nada, sólo quería asegurarme de que supieras que aún te quiero, un poquito. Fingir que todo está perfecto, mientras duele gastar la vida tratando de localizar lo que hace tiempo se perdió. Qué triste es asumir el sufrimiento, patético es creer una mentira. Como si fuese tan fácil deshacerse del amor. Como si fuese una prenda
que se quita y se acabó, así de simple y sencillo, me pides que te olvide. Como si fuese tan fácil arrancarte de mi mente. Como si todo lo vivido hubiese sido tan intrascendente ¿Cómo hacer a un lado el pasado? Como si fuese tan fácil suplicarle a mi cerebro que le ordene al corazón que le anule cualquier recuerdo. Me confundís con vos, pero yo sí te quiero. Duele verte con una mina a la que le faltan las ideas y le sobran argumentos. Mientras yo caliento el banco de suplentes, con la camiseta puesta, para incluirme en tu futuro. Acá está tu ser clandestino, para jugar al escondite, como amante guerrillero, para cubrirte tus carencias de ternura y desenfreno. Mientras tanto dame un beso atrincherado, de esos que te hacen sentir culpable. Tómame como al tequila, de un golpe y sin pensarlo. Si alguien sale ganando eres vos, querido amigo, aunque pienses lo contrario. Y es que vos ahora tenes dos y a mí me divide uno. "Le dije 'cuente con un servidor si lo que quiere es vengarse' y me sonrió". Si vivo, es porque muero por vos, así todo tiene sentido, incluso lo poco que queda de mí. Si te divierte verme y te gustan mis besos, y me ves como la perfecta compañera de tertulias. Si soy tu amiga con derecho, mientras te dure la parranda... No te enamoraste de
mí, sino de vos cuando estás conmigo. Yo pensando en el futuro y vos en la fiesta de esta noche. Si me quieres un poquito, dímelo aunque sea en un e-mail. De las locuras que hacemos, de los besos furtivos, de las caricias que mueren justo al haber nacido ¿Quién ganará la batalla de este amor desperdiciado? Lo que antes fue pregunta, hoy es una afirmación; no te enamoraste de mí, sino de vos cuando estás conmigo. Olvidarte es un intento que no lo deseo tanto, porque tanto es que lo intento, que me acuerdo mucho más. Olvidarte es lo que espero para reanudar mi vida. Harta de seguir soñando con la posibilidad de que un día por error, o pura curiosidad le preguntes a un amigo por mis huesos. No se acaba el amor sólo con decir adiós, hay que tener presente que el estar ausente no anula el recuerdo, ni compra el olvido, ni nos borra del mapa. El que vos no estés, no te aparta de mí. Entre menos te tengo, más te recuerdo, aunque quiera olvidarte, estás en mi mente y me pregunto mil veces ¿Por qué es tan cruel el amor? No me deja olvidar, me prohíbe pensar, me ata y desata y luego de a poco me mata, me bota, levanta y me vuelve a tirar ¿Por qué es tan cruel el amor? no me deja olvidar, porque aunque vos ya no estés, se mete en mi sangre y se va de rincón en rincón, arañándome el alma y rasgando el corazón. No se acaba el amor sólo porque no estás, no se puede borrar así por así, nuestra historia. Sería matar la memoria y quemar nuestras glorias ¿Qué voy a hacer conmigo, si el idiota del espejo suele ser mi único amigo? Siempre a lo mismo; a tratar de sobrevivir sin ti, a luchar por no sentirme así; tan desesperada, suplicando olvidarte. Siempre a lo mismo... Me siento mal y después, mucho peor. El que no estés no me hace ningún favor ¿Cómo explicarle al cerebro que le diga al amor que de inmediato te olvide, por favor? Y sin embargo, termino amándote mucho más. El problema no fue hayarte, el problema es olvidarte. El problema no es tu ausencia, el problema es que te espero. El problema no es que mientas, el problema es que te creo. El problema no es que juegues, el problema es que es conmigo. El problema no es quererte, es que vos no sientas lo mismo ¿Cómo deshacerme de ti, si no te tengo? ¿Cómo alejarme de tí, si estás tan lejos? ¿Cómo encontrar el la alacena los besos que no me diste?


2 comentarios:
Hay no, me morí.
"No se acaba el amor sólo con decir adiós, hay que tener presente que el estar ausente no anula el
recuerdo, ni compra el olvido, ni nos borra del mapa. No se acaba el amor sólo porque no estás, no se puede borrar así por así, nuestra historia." (aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa)
sos de gata loco.
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